JOSE MARIA SANCHEZ VERDU DIRIGIO AL GRUPO 'ENIGMA'
Con los primeros fríos en Zaragoza, el interior del Auditorio acogía en su sala Luis Galve a un público expectante ante la presencia del compositor José María Sánchez Verdú que, invitado por su titular Juan José Olives, iba a dirigir a la Orquesta de Cámara del Auditorio, el Grupo "Enigma", en un monográfico de su obra.
La asombrosa trayectoria de este autor que le ha llevado a ser docente en la Robert-Schumann-Hochschule Düsseldorf y en la Cátedra Manuel de Falla de Cádiz, a poseer el Premio Nacional de Música y un catálogo extenso que cuenta con cuatro óperas estrenadas, que ha contado con todo el apoyo de nuestro prestigioso compositor Cristóbal Halffter, iba a estar reflejada en una sesión en la que se iban a escuchar cuatro de sus recientes creaciones de cámara.
Su música es un tejido de partículas mínimas. Las obras surgen de referencias extramusicales, literarias, paisajísticas, místicas, religiosas que disponen al oyente hacia ellas.
Los músicos de "Enigma" fueron obedientes a la austera dirección del compositor y desgranaron con el máximo de entrega y savoir-faire el profuso catálogo de técnicas instrumentales y sonoridades sutiles que siembran las composiciones del algecireño.
Cuatro composiciones semejantes entre si en un concierto homogéneo marcado por el estatismo y la contemplación, el sonido mágico, en algo así como una mixtura entre Gérard Grisey y Helmut Lachenmann.
Qasid 7 y Jardines de Adonis (una escena de la ópera Gramma sobre texto de las Metamorfosis de Ovidio) contaron con la presencia de la soprano Celia Alcedo que cumplió cum laude con su papel en intervenciones reducidas a la mínima expresión, al mínimo volumen, al mínimo gesto vocal.
Las otras dos obras, exclusivamente para instrumentos, fueron Giorno doppo giorno, sobre versos de Salvatore Quasimodo, y Arquitecturas de Machaut, cinco piezas superpuestas estructuralmente sobre la Misa de Nôtre Dame de Guillaume de Machaut y que por momentos podría recordar el estilo de Salvatore Sciarrino.
Labor compositiva minuciosa, trabajo interpretativo exigente, resultado sonoro sugestivo. Un concierto que exigió una atención extrema mental y auditiva. ¿Respondió a la expectativa del público? Parece que nadie salió con opiniones neutrales ni indiferentes, más bien en un extremo o en otro.
1 comentario
juanroyo -